viernes, 27 de octubre de 2023

LAS ABERRANTES METÁFORAS DE MILEI

LAS METÁFORAS DE MILEI

Son una de cuestión de moral pública y privada, no un tema de Salud mental.

Me puedo referir a esto ya que no estoy evaluando la salud mental de una persona sin su autorización ni tengo la menor relación profesional con esa persona.

La "metáfora" con pedófilos y pibes en un jardín de infantes, la de estar entre las sábanas de quienes lo critican  en la web, las de destrucción a quien se le oponga expresan una base moral de esta persona.

Ahí si puedo opinar como un ciudadano que está considerando qué tipo de presidente quiere para este país y sus semejantes.

Imaginemos una situación: reunión de cualquiera de nosotros con amigos. Allí, un Milei dice, sin ninguna relación con el tema, lo del pedófilo con los pibes y el jardín. ¿Alguien le sigue el tono y contenido? ¿Alguien agrega una metáfora similar? ¿Alguno de los presentes puede emitir una fase que no sea "te fuiste al pasto"? ¿Dejaríamos a nuestras hijas e hijos a cargo de Milei?

¿Por qué estas dudas?

Porque nosotros, los padres y madres, hermanos, amigos, semejantes, tenemos una moral que prioriza la convivencia, que no naturaliza el abuso, que cuida a los más vulnerables, que considera que las chicas y chicos son de algún modo una riqueza y una responsabilidad para todas y todos.

No sólo no producimos esas metáforas aberrantes que nos convocan a algo oscuro, sucio, repudiable. No las podemos incorporar a nuestro discurso, están fuera del campo de nuestras acciones. Es una parte de aquello que nos hace humanos. 

Pues bien, este candidato a presidente lo dice a los gritos en los medios de comunicación, abiertos a ser escuchados por nuestras chicas y chicos. Nada detiene sus frases abusivas, por el contrario las repite y reafirma sin que nada lo haga siquiera retractarse.

Por eso, la pregunta no es si Milei podría gobernar como presidente sino qué haría con semejante poder alguien tan inmoral.

¿Qué podríamos esperar de un presidente que nos gobierne con esos parámetros? ¿Qué límite puede tener frente a leyes, reglamentos, disposiciones, si no es capaz de tenerlos ante leyes que son previas a cualquier constitución y son las que constituyeron nuestra humanidad misma?

No se encuentra otro antecedente de ese grado de perversión en nuestra historia democratica, salvo en las irrupciones  dictatoriales que ejecutaban su inmoralidad, pero aún teniendo la impunidad de las armas trataban de ocultarla en sus decires.

Esto no es un dato aislado, es una prueba del tipo de personas que mayoritariamente somos, fuimos y queremos ser como sociedad en democracia.

Forma parte de nuestra genética y estoy seguro que la próxima votación vamos a refrendarla.

No hay comentarios:

Publicar un comentario