domingo, 25 de octubre de 2020

COVID19: AQUEL MITRE, ESTE LARRETA


"El aislamiento se corre al interior", refirió el artículo de Página 12 a propósito de los anuncios oficiales sobre COVID19. Pero los recursos provistos por Nación siguen malutilizandose en CABA en lugar de, reducción de contagios mediante, poder trasladar una parte allí donde las situaciones más criticas lo requieran.

Es recomendable cruzar los cuadros de las páginas 4 y 9 del informe en basó su intervención nuestro presidente.


Hay provincias al borde del 100% de ocupación de camas UTI, 12 por encima de lo controlable a corto plazo. Parece, desde una mirada metropolitana, un problema serio "del interior", "de las provincias", pero visto con sentido nacional es un problema "del país".

Por la entrada del COVID19 vía viajeros, por el rescate masivo que se realizó con esas y esos compatriotas, por la expansión que tuvieron los contagios en CABA y su proyección al AMBA, los recursos nacionales contra el COVID19 se emplearon predominantenente en esta área. Era lógico, en tanto los casos se concentraban allí, desplegar la acción allí de modo de reducirlos y proveer, mediante controles estrictos, a evitar su expansión al resto del país. 


Pues bien, a caballo de las aperturas de CABA y el crecimiento de contagios que generaron allí y en AMBA, del movimiento comercial y de alguna impunidad en personas que evitaron controles, el COVID fue cruzando fronteras municipales y provinciales hasta alcanzar el 65% de nuevos casos fuera del núcleo inicial de infección.

Entonces la situación es desesperante en las provincias, se podría concluir. Pero no. 

Si el gobierno de CABA hubiera trabajado para reducir sustancialmente los casos (eso es "un avance" Larreta y Quirós, no seguir montados en una meseta inviable), si hubiera atendido no convocar trabajadoras y trabajadores no esenciales residentes en el AMBA, buena parte de lo invertido en su zona se podría hoy redistribuir en todo el país, atento a la emergencia de cada provincia. 

Camas UTI, personal, equipos para el personal, etc. Pero no. 

Montados en su mentalidad mitrista, Larreta y su gente "siguen avanzando" con apertura de escuelas a un mes del fin de las clases, apertura de shoppings, etc. , sin miras de devolver al Estado nacional siquiera una parte de lo invertido para frenar al COVID. 


Un ejemplo: cuando la desidia de Larreta y sus funcionarios respecto a la provisión de agua en la Villa 31 generó una explosión de COVID, el Estado nacional acudió con el plan detectar y no se restringió a ese barrio, siguió con 1-11-14, 21-24, en una tarea que, además, el clasismo del Cambiemos impide pensar y menos atender. Cuántas personas, equipos, fondos, puede disponer hoy el gobierno de CABA para devolver en asistencia lo que recibió? NADA. Porque sigue parada en dos mesetas. La epidemiológica, un número de casos que hacen imposible reducir recursos sanitarios aunque sean prestados. Más si se piensa en ampliar cada semana la circulación. La meseta político ideológica desde la que miran al resto del país. Son unitarios fuera de tiempo, pero con la misma desidia y rapacidad que la de sus antecesores. 

El Estado nacional está hoy acuciado por la pandemia, pero también por los costos de volver a poner en marcha el país desguazado y desarticulado que dejó la gestión macrista. De no activarse una política nacional de restricción que interrumpa el jolgorio irresponsable y reduzca los contagios en AMBA, la provincias marchan a una catástrofe provocada, como tantas en la historia, por políticos porteños que se piensan en otro país y solo se acuerdan de la Nación a la hora de necesitar ayuda.

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